domingo, 29 de abril de 2007

Carlos Tomás Temoche habla sobre ''La Espesura de la ciudad''


En Marzo de 1923 nace Hanne, hija de Brecht y de Marianne Zoff y en Mayo estrena "En la Jungla de las ciudades". En una entrevista hace años recientes Hanne dijo "El Teatro de mi padre sigue vigente" y esto lo demuestra Mario Delgado en "La espesura de las ciudades" que está presentándose en el Instituto Goethe.

Lo agradable y gratificante fue ver nuevamente a José Carlos Urteaga, "el ahogado más bello del mundo", con su vital presencia escénica nos obligaba a mirarlo. También a Helena Huambos y la fuerza telúricamente tierna de su voz; Flor Castillo con el salero, la zandunga y el gusto del algarrobo piurano. Doña Flor es como el vino, nos trepa y noquea.

El solvente elenco resuelve acertadamente este segundo intento de Brecht de romper con el romanticismo expresionista que había empezado con "Tambores en la noche".

A la manera del cine romántico se da el enfrentamiento de un pequeño empleado de una librería de Chicago : George Garga, construído por Antonio Quevedo - quien está creciendo como actor al elaborar un personaje con acertados matices-, contra Shlink un rico maltés, negociante de madera, interpretado por Juan Maldonado.

Brecht plantea un nuevo Teatro a partir del combate de box donde los contrincantes apelan al "vale todo", es una lucha sin cuartel, cualquier similitud con la realidad ¿ es pura coincidencia ?.El dramaturgo alemán sigue demostrando que la acción dramática avanza por contradicciones de necesidades sociales y no por voluntades libres. Lo dice Garga : "El combate espiritual, créame, no existe". Aquí los adversarios además de apelar a todas sus fuerzas involucran a sus familiares. Garga arrastra a su esposa y hermana que se prostituye a posteriori. Miríam Fonseca , asume el papel de la hermana, es un colirio para los ojos por su lozanía y frescura a flor de piel. La esposa es Flor Castillo.

Fernándo Fernández es el padre de Garga. Bueno, ya es tiempo - así como Helena Huambos fue premio Nacional de Teatro - igual debe pasar con Fernándo.

En este montaje aparece el cambio de piel que volverá posteriormente con "Galileo Galilei" del mismo autor. De como las clases dominantes transfieren a las dominadas sus gustos y comportamientos. Al final, los rivales cambian de ropa demostrando que cumplen roles sociales en este planeta. Final inesperado, Garga gana a lo Pirro, sólo porque es más jóven y lo dice "Pero todavía tengo mucho tiempo por delante" y nos damos cuenta que los encarnizados contrincantes se han utilizado mutuamente, algo así como nuestros partidos políticos que se encaman en secreto.

En esta lucha por la sobrevivencia, misma supervivencia darwiniana de las especies, los que pierden son los que están alrededor de los principales rivales. Claro, votamos en las elecciones por zutano o mengano y luego nos traicionan demostrando que el mundo es una porquería.

Los de arriba siempre seguirán allí, si nosotros se lo permitimos.

Muchos extrañamos el round final pues Brecht nos deja en pindinga, bueno creo yo, que este todavía no se da en la vida real y sería aristotélicamente catártico resolverlo. El combate lo daremos nosotros, en nuestras organizaciones, en nuestros gremios, allí estará el final de muchas obras brechteanas. La lucha por sólo el placer de luchar no existe.

En el montaje Delgado ha usado el espacio de manera inteligente y los cubos cumplen una función proteíca: a veces son mesas, escaleras, las piedras del río Etc. El biombo al volverse nos muestra la precaria casa de Garga. Lo más acertado fue la construcción del ring de box - con cinta engomada - para el supuesto combate final.

Mario logra la sensación de enclaustramiento en que nos encontramos ; somos algo así, como seres humanos dentro de una imaginaria nave, nos tocamos, enredamos; estamos a punto de reventar pero - unilateralmente - nos encontramos solos. En esta velocidad de los medios de comunicación, con este invento que pulso torpemente, el mundo es una aldea pero seguimos solos con nuestra soledad.

Fue un acierto el uso de los elementos para demostrar esta jungla en la que nos despedazamos por avanzar y tumbar al otro con reacciones e instintos primitivos. Acordémonos de las marchas patrocinadas desde el gobierno para promover la pena de muerte en el Perú.

Mario y los Cuatrotablas estarían listos para montar "Lux en tenebris" del sempiterno Brecht.

Carlos Tomás Temoche
V.A.C.YAWAR

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